Carretera exige intervención
Transportistas denuncian colapso vial tras lluvias en ruta Atalaya–Tahuania
Usuarios cuestionan trabajos municipales y reportan tramos completamente intransitables

Tahuanía.- El malestar entre los transportistas y usuarios de la ruta Atalaya – Tahuania se intensificó tras el rápido deterioro de la carretera al inicio de la temporada de lluvias, pese a que la Municipalidad Provincial de Atalaya realizó trabajos de mantenimiento hace apenas unos meses.
Conductores que recorren este tramo denunciaron que el camino se encuentra prácticamente intransitable, generando demoras, riesgos y pérdidas económicas para quienes dependen de esta vía para trasladar pasajeros y mercancías.
En videos y fotografías registradas por los propios transportistas, se evidencia el estado crítico de la carretera, con vehículos completamente atascados en el barro, largas filas de unidades esperando avanzar y tramos donde la movilidad es casi imposible.
Las imágenes más críticas corresponden a la zona Tahuanti – Chorinashi, específicamente a la altura de Lagarto Juvenil, donde la carretera se ha convertido en un lodazal que impide el desplazamiento normal de motos, autos y camiones.
El principal reclamo de los usuarios apunta a que la municipalidad anunció la rehabilitación de 30 kilómetros de la vía en octubre; sin embargo, los transportistas cuestionan la efectividad de dicho mantenimiento, pues aseguran que el tramo intervenido no muestra mejoras reales.
Por el contrario, señalan que la carretera se ha deteriorado de forma acelerada apenas iniciadas las lluvias, lo que evidencia—según los denunciantes—una obra deficiente o insuficiente para soportar las condiciones climáticas de la zona.
Los afectados alertan que la situación afecta directamente a la conectividad entre Atalaya y Tahuania, una ruta clave para el transporte de alimentos, medicinas, productos agrícolas y pasajeros que se movilizan diariamente.
La falta de transitabilidad no solo incrementa los costos operativos de los transportistas, sino que también perjudica a comunidades rurales que dependen de esta vía como único acceso hacia la ciudad.
Ante esta problemática, los conductores exigen una respuesta inmediata por parte de las autoridades provinciales y la implementación de un plan de intervención sostenido, especialmente diseñado para enfrentar la temporada de lluvias.
Señalan que no basta con un mantenimiento superficial, sino que se requiere un trabajo técnico de mayor alcance que permita asegurar la circulación continua durante los meses más críticos del año.
Los transportistas y ciudadanos afectados solicitan también supervisión y transparencia en los trabajos realizados, así como la presencia de maquinaria permanente en los puntos más vulnerables.
De no recibir una solución en el corto plazo, advierten que la carretera podría quedar completamente inhabilitada, afectando gravemente las actividades comerciales, los servicios básicos y el tránsito de emergencia en esta región de Ucayali.
Mientras tanto, el malestar continúa creciendo entre los usuarios, quienes insisten en que la vía Atalaya–Tahuania no puede seguir expuesta al abandono cada vez que inicia la temporada de lluvias.
La situación, aseguran, requiere atención prioritaria y un compromiso real de las autoridades para garantizar la seguridad y el desarrollo de las comunidades involucradas.
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